Ser un turista responsable no es fácil, incluso los que pensábamos que lo éramos, hemos llegado a descubrir que no lo éramos tanto «yo jamás haría daño a un animal» pensamos, no lo pongo en duda pero, a veces, sin saberlo, estamos siendo cómplices de la crueldad con los animales. Y ahora os hago unas preguntas: ¿Quién no ha ido alguna vez al circo a ver a los osos «bailar»? ¿Quién no ha ido alguna vez a un zoo a ver a los animales? ¿Quién no ha querido ha paseado alguna vez a lomos de un animal o en un carro tirado por ellos? Todos, entre los que me incluyo, hemos sido cómplices de ello.
El pasado mes, tuvimos la suerte de asistir a una charla que nos ofreció FAADA (Fundació FAADA para el Asesoramiento y Acción en Defensa de los Animales) en el hotel Evenia Rosselló. En la charla, además de enseñarnos imágenes no aptas para las mentes sensibles como la mía, nos explicaron qué hay detrás de todas esas actividades con animales. Os resumo:
A todos nos encantaba de pequeños (de mayores también) ver los espectáculos con los delfines, como saltan y obedecen al cuidador mientras nosotros aplaudimos como locos «que bonitos» «que listos son» , eso es cierto. Pero no nos quieren, no les gusta que les toquemos y muchos de los delfines que son usados para espectáculos acaban locos de dar vueltas en la misma piscina una y otra vez, por muy grande que sea no es suficiente y, por desgracia, muchos de ellos se suicidan golpeando su cabeza contra las paredes, demasiado triste.
Que guay es montar en elefante verdad? Pues para que el elefante se deje, lo separan de su madre desde muy pequeño, les pegan, les encadenan y les encierran hasta que obedecen. En el «mejor» de los casos, la madre de la cría está allí para verlo, en el «peor» no está porque la han matado porque no permitió que le quitaran a su cachorro. ¿Qué madre no protege a su hijo? No pondré el video que nos pusieron porque es para llorar, pero lo podéis buscar en Youtube.
A todos nos gustan los vídeos en los que aparecen animales que hacen cosas de humanos, «que perro tan listo» «que mono» incluso, miras al tuyo como diciendo: «ya podrías tu hacer esas cosas» Sed sinceros, ¿alguna vez habéis conseguido que vuestro perro «baile»? Lochi lo hace si le pones comida pero sólo unos segundos y si se puede apoyar en tu pierna, lo hace sin dudarlo. Os diré cuál es el secreto para que el animal «baile» y haga piruetas: no darle de comer hasta que no lo haga. ¿Os parece feliz el elefante de la foto? A mí desde luego no. Además, disfrazar a un animal de persona es cruel y para colmo, los animales tienen sentido del ridiculo, sino os lo creéis, ponedle a vuestro perro alguna prenda ridícula y reíros de él, seguro que os mirará con cara de pocos amigos.
También está la moda de hacerse fotos dándole un biberón a un cachorro de tigre. No, no y no. A los cachorros los alimentan sus madres, ¿o es que a vosotros os alimentó un ser de otra especie? Que sepamos sólo les pasó a Rómulo y Remo con la loba, pero poco más. Para que el cachorro se deje, lo sedan, les arrancan las garras y los colmillos, después de haber matado a su madre. Pensad que un tigre nos arrancaría la mano si la acercamos a su boca ¿porqué se iban a dejar dar el biberón?
Supongo que ahora os haréis la misma que me hice yo en su día ¿Cómo sé si estoy siendo responsable con los animales o no? Muy sencillo, FAADA ha creado un mapa en el que pinchado en cada zona o país, te sale la lista de actividades irregulares celebradas con animales y los centros de rescate y proyectos recomendados en cada sitio. Os sorprenderá.
Os doy algunos consejos para evitar que nuestro tiempo y dinero afecten de manera negativa a los animales mientras viajamos:
– No participar en actividades que impliquen animales enjaulados, encadenados o en actuaciones
– Evitar los paseos a caballo, en burro, elefante o camellos o en actividades donde ellos tiren de un carro
– No alojarse en hoteles o comer en restaurantes donde expongan animales salvajes en cautividad
– No pagar por ver a animales bailando vestidos como personas
– No des de comer a los animales salvajes o en cautividad, ya que esto puede tener graves consecuencias para su salud y para tu seguridad.
– No comprar souvenirs hechos con algunas partes de animales
– No apoyar el uso de animales como objeto fotográfico
– No apoyar espectáculos donde los animales tengan que realizar posturas o comportamientos que no tienen que ver con su naturaleza.
Si has participado no pasa nada, incluso las de FAADA nos confesaron haber participado cuando eran más jóvenes y no disponían de la información que tienen ahora. Los animales tienen que vivir libres y no podemos someterlos a crueldad para lucrarnos con ellos y nunca participar en estas actividades, si dejan de ser rentables, dejarán de hacerlas. Al menos tendremos la conciencia tranquila si no es así.
Si eres blogger de viajes o tienes una empresa de turismo y quieres comprometerte con la causa, firma el manifiesto y no formes parte ni fomentes este tipo de actividades. Por supuesto, este blog firmó el mismo día que se enteró de que existía esta iniciativa. Entre todos podemos hacer de este mundo un lugar mejor.
Que bueno!! Que cantidad de cosas les hacen a los animales y nosotros consideramos normales por verlas desde pequeños 🙁
totalmente! mientras oía lo que me contaban pensaba «lo he hecho todo mal hasta ahora» nunca es tarde para aprender, gracias por pasarte 😉
Un buen post hay que pensar en nuestros amigos los animales, reflexionar